Por @frankstrada
Desde el inicio de los medios de comunicación se han practicado acciones como la representación de artistas, en estos tratos, el artista gana posicionamiento y reconocimiento mientras los representantes se apoderan del prestigio que poco a poco van creando en conjunto.
Durante mucho tiempo funcionó hasta que el internet llegó, los usuarios pudimos conocer medios virtuales para darle salida a la creatividad, los proyectos dejaron de estar guardados en cajones y ahora se exponen en los diferentes medios sociales. Han sido tan exitosos que en muchos casos han superado en popularidad e influencia a los mismo artistas de cine, radio y televisión.
Me llama la atención el caso de Yuya y Werever, video bloggers que a través de youtube han logrado capturar la atención de millones de usuarios, (el contenido que emiten es otro tema), lo relevante es la jugarreta que uno de sus representantes ha puesto en práctica, registrarse como network en la red mundial más grande del mundo y despojarlos de su marca.
Antes de conocer el tema pensé que era un truco publicitario y no es así. Están quebrantando la visibilidad de exposición del talento independiente mexicano.
Javier Talán (el representante) ha olvidado que los tiempos ya cambiaron, las viejas mañas han quedado superadas por medios de expresión capaces de destruir reputaciones y llevar a la gloria a los resistentes de los sistemas.
Desconozco los términos de los contratos de los blogueros con el representante, pero, lo que si conozco es la potencialidad que en este momento se le está dando a Yuya y Werever, están a punto de brincarse por completo cualquier ápice de poder mediático, están a punto de demostrar la verdadera fuerza de los usuarios de internet en México, están a punto de demostrar que los medios convencionales, sus representantes y sus costumbres serán aplastadas por un solo motivo, la libertad de expresión.
Desde estas líneas todo mi apoyo a Yuya y a Werever, ya no están dando un ejemplo de cómo defender ideales y de no sucumbir ante la avaricia de personas sin respeto por la creatividad.