La privacidad en las redes sociales parece ser una ilusión.

Kelli Burns, profesora de Comunicación de Masas de la Universidad de Florida del Sur, dice tener indicios de que la red social Facebook accede al micrófono de los teléfonos inteligentes para generar publicidad.

«Tengo muchas ganas de irme de safari por África», «Sería genial poder montar en uno de estos jeeps», dijo Burns a través de una llamada por Facebook.

Minutos después, la red social compartió en su cuenta anuncios de jeeps y publicaciones sobre safaris.

«No creo que la gente se dé cuenta de lo mucho que Facebook puede registrar todos sus movimientos», dijo en una entrevista a la cadena NBC4 y compartida por diario español El Mundo.​

Facebook monitoriza las conversaciones de Facebook Messenger mediante un sistema que detecta palabras clave, que según la compañía sirve para evitar la planificación o ejecución de delitos.

La intención parece ir acorde a la vía correcta; sin embargo, esto preocupa a quienes debaten sobre la línea entre seguridad y violación a la privacidad.

La máscara de la red social

Al inicio, Facebook vendía publicidad basándose en los gustos manifestados por los usuarios; es decir, lo que ellos declaraban que les gustaba mediante la interacción.

Ahora, Facebook espía la realidad del usuario. Toda la información acumulada en la navegación es conocida por Facebook mediante el “trackeo” que tiene relación con la localización geográfica y los sitios de internet que frecuentan los usuarios.

La compañía inserta cookies en el navegador, capaces de monitorizar tu actividad en la red.

Facebook asegura que utiliza los datos para mejorar la seguridad y sus plugins y niega que esta información le genera un perfil claro de quiénes son, cómo son y qué consumen los usuarios.

(http://www.elsalvador.com/)